Somos más del 70 % de afiliadas al SUTEP
En el Día Internacional de la Mujer
Somos más del 70 % de afiliadas al SUTEP
Y la lucha contra este sistema y modelo es CONJUNTA, no separados.
* Maruja Leyzaquía, secretaria de equidad y género del SUTEP
Este 8 de marzo, se conmemora a las mujeres que a lo largo de la historia han luchado por la igualdad, la justicia, la paz y el desarrollo social, y desde el Sindicato Unitario de Trabajadores en la Educación del Perú, SUTEP, queremos valorar el esfuerzo, identificación, lucha y perseverancia de nuestras colegas que forjaron y siguen contribuyendo a la vigencia de nuestro gremio, que participaron y participan junto al pueblo de los grandes cambios que el país requiere.
El SUTEP, creación heroica e histórica de maestras, docentes y auxiliares de educación, que con el importante liderazgo de Horacio Zeballos Gámez consolidaron la unidad del magisterio, en esos tiempos divididos; años de lucha contra la dictadura, de lucha por nuestros derechos, por el reconocimiento, por una educación de calidad para el pueblo, y siempre por la dignificación de nuestra profesión.
Desde el nacimiento del SUTEP, la mujer maestra ha tenido un rol protagónico en la lucha.
Desde estas líneas, queremos visibilizar y destacar la labor de lideresas como Soledad Lozano Costa, Caridad Montes Rebaza, ex secretarias generales del SUTEP; Matilde Alvites Ibarra, Leyla del Águila Torres, Reyna Cabrera Aquino, Galdys Pajuelo Oncoy, Nelly del Río Roldán, Silvia Valderrama Pizarro, Lily Girón Victoria, Ina Socorro Castañeda, Erika Arenaza Casaverde, Mirian Quispe Polo, reconocidas dirigentes nacionales y regionales; así como Antonieta Valer y Alina Zuleta Bueno, fundadoras del SUTEP.
Expresar nuestro sentido homenaje póstumo a grandes mujeres como Hilda Jara, ex secretaria de Equidad y Género del CEN; Elizabeth Martínez Minaya, primera secretaria general del SUTE Regional Junín; Sarai Orrillo Clavo, dirigente del SUTE Regional San Martín; Saida Garcia, ex secretaria general del SUTE XX sector; Juana Rosa Figueredo, dirigente del SUTE XII sector; Raquel Benavides Mendoza, maestra del SUTE Regional Ayacucho que falleciera en la marcha de sacrificio hacia Lima el 12 de mayo del 2003; entre otras educadoras y auxiliares de educación que desde su participación activa en la lucha política-sindical permitieron la forja de este glorioso y combativo sindicato que es el SUTEP.
¡GLORIA ETERNA A NUESTRAS HEROICAS COMPAÑERAS SUTEPISTAS!
¡CON SU EJEMPLO, VENCEREMOS!
A tres años de confirmarse el primer caso de COVID-19 en nuestro país, docentes y auxiliares de educación aún cargamos con las consecuencias de políticas públicas improvisadas que estuvieron muy lejos de dar respuestas eficaces a la emergencia sanitaria que vivimos junto a nuestros niños, niñas y adolescentes.
Desde el sindicato se analizó el impacto que tuvo la pandemia sobre el sistema educativo y las consecuencias que tendría en la formación de nuestros estudiantes, pero al abordar este tema no podemos soslayar el impacto que tuvo en los y las docentes, especialmente en las mujeres, quienes componen alrededor del 70 % de la fuerza laboral en el sector educación.
Las medidas adoptadas por el gobierno de turno, como el cierre de las instituciones educativas por la cuarentena, obligó a la permanencia en el hogar, convirtiendo nuestros espacios de casa en aulas y a duplicar las jornadas laborales al tener que asumir de manera desigual educar y cuidar de nuestras familias, sin que el Estado designe recursos para el desarrollo de tan colosal labor.
La virtualidad no tenía horario, trabajábamos las 24 horas, siempre pendientes de los dispositivos móviles para atender a nuestros estudiantes, así como a las madres y padres de familia con el fin brindarles asesoramiento de cómo acompañar a sus hijos e hijas en esta “nueva normalidad”.
Las medidas de confinamiento contribuyeron al aumento de la violencia contra la mujer al interior de sus propios hogares; muchas maestras no fueron la excepción ante este problema de salud pública y violación a sus derechos a nivel mundial, mujeres y niñas quedaron encerradas en casa con sus agresores sin que el Estado asuma alguna responsabilidad por falta de prevención, atención y sanción a la violencia contra las mujeres.
Estas y otras brechas se acrecentaron durante la pandemia, que fueron puestas de manifiesto en diversos documentos dirigidos por nuestro sindicato hacia el Gobierno, exigiendo medidas y disposiciones que garanticen la seguridad de las docentes; pero también se realizaron eventos para darle soporte y asegurar la continuidad de los procesos educativos, donde profesores y auxiliares afronten con éxito los retos que teníamos en el marco de la virtualidad.
“Varones y mujeres debemos entender que la lucha contra este sistema y modelo es CONJUNTA, no separados”.
La mujer maestra es ejemplo de lucha y dedicación.
Como SUTEP, siempre hemos señalado que somos más del 70 % de afiliadas, pero ¿qué significa ello?, ¿cuáles son los avances que hemos realizado para este significativo sector de maestras y auxiliares de educación?, ¿qué planteamos en la negociación colectiva?
Significa que siendo más del 70 %, autocríticamente, nos falta visibilizar, promover más Escuelas de formación para maestras y auxiliares de educación con temáticas pertinentes para su cualificación y que permitan su incorporación en cargos de la estructura sindical, demostrando que varones y mujeres debemos entender que la lucha contra este sistema y modelo es CONJUNTA, no separados.
Somos más del 70 % de mujeres y los avances como SUTEP, nos benefician directamente; por ejemplo, el pago de la CTS para docentes y auxiliares de Educación y la lucha sigue por su reglamentación. El incremento de remuneraciones para auxiliares de Educación a partir de marzo. El bono de S/950; conversión de plazas eventuales a orgánicas; nombramiento de docentes con vigencia al 2023 (que tenemos la certeza que lo vamos a lograr) y la lucha constante por la dignificación de nuestras y nuestros colegas cesantes y jubilados.
Desde la teoría la negociación colectiva se erige como una propuesta relevante para plantear y/o replantear demandas que solucionen problemas que vulneran nuestros derechos como maestras y auxiliares. La experiencia nos dice que no basta con las cláusulas de género, tenemos que participar y lograr que estas demandas sean discutidas con la participación de mujeres y varones que estén persuadidas y persuadidos de lo justo de nuestros planteamientos y de nuestra participación en las comisiones negociadoras, ya que no queremos que se terminen incorporando cláusulas que perpetúan estereotipos y roles de género.
El SUTEP es el sindicato absolutamente mayoritario del magisterio y el 70 % lo conforman mujeres.
Desde el SUTEP, fortalecemos la promoción y el liderazgo de las mujeres dentro de la estructura gremial, estableciendo iniciativas que brinden apoyo y orientación a las docentes que viven situaciones de violencia, manteniendo en la agenda sindical docente una demanda prioritaria: la exigencia de servicios estatales de cuidados universales, planteado en las cláusulas de género de nuestro Pliego de Reclamos.
“Somos más del 70 % de mujeres y los avances como SUTEP, nos benefician directamente”.
Actualmente, luego de mucho debate, hemos incorporado cláusulas de género en nuestro Pliego de Reclamos, que son puntos esenciales en el marco de la negociación colectiva SUTEP-MINEDU, que son las siguientes:
CLÁUSULA DÉCIMO OCTAVA: BONIFICACIONES POR FAMILIA, LACTANCIA, REFRIGERIO Y MOVILIDAD
El MINEDU otorgará las siguientes bonificaciones a los docentes y auxiliares de educación nombrados y contratados: por familia, refrigerio y movilidad. Cada bonificación lo percibirá de forma mensual y equivalente al 20% de la remuneración íntegra mensual.
El MINEDU otorgará una bonificación por lactancia materna equivalente a una (01) Remuneración Integra Mensual (RIM) de acuerdo a su escala magisterial a las profesoras y piso salarial de los auxiliares de educación.
CLÁUSULA TRIGÉSIMO OCTAVA: REDUCCIÓN DE LA EDAD DE JUBILACIÓN
El MINEDU, promoverá la derogatoria de la Ley N° 26504 que elevó a 65 años la edad de jubilación para varones y mujeres, respetando la edad de jubilación: 60 años para los varones y 55 años para las mujeres.
CLÁUSULA CUADRAGÉSIMO NOVENA:
El MINEDU y SUTEP en convenio con instituciones estatales, organizarán campañas de sensibilización sobre temas de: salud sexual y reproductiva, violencia contra la mujer y eventos culturales.
El MINEDU, otorgará un bono mensual a cada trabajadora que tenga un hijo entre los 0 hasta los 02 años de edad, por concepto de guardería.
El MINEDU, en convenio con ESSALUD, realizará campañas gratuitas, de análisis clínico general: sangre, orina, radiografía de tórax, electrocardiograma y papanicolaou.
El MINEDU otorgará un bono excepcional para maestros y auxiliares de educación con discapacidad.
El MINEDU, mejorará las condiciones para el trabajo con estudiantes de habilidades especiales.
Sabemos que aún es insuficiente, que queda mucho por hacer, por ejemplo, actualmente el sistema laboral en el magisterio donde cada vez se reducen las plazas para nombramiento, hace que las maestras deban postular para trabajar en plazas de contrato colocándolas en situación de vulnerabilidad ante su empleador ya que son presa de acoso sexual y maltrato psicológico dentro de las instituciones educativas por su misma situación de inestabilidad laboral.
En el seno de nuestro sindicato seguiremos trabajando por la cualificación sindical y política de las maestras, seguir bregando por la lucha de espacios de dirección, por visibilizar los liderazgos sectoriales, regionales, de base y no cerrarles el paso, sino darles oportunidad y motivarlas en su crecimiento.
Hemos luchado juntas y juntos, a pesar de que el piso no era parejo, nos dimos tiempo entre atender la casa, la familia, trabajar y participar en las marchas, asambleas y huelgas, pero también somos conscientes de que los tiempos que se vienen serán difíciles; tenemos la primera mujer presidenta dictadora, con más de medio centenar de asesinados a manos de las fuerzas del “orden”, el movimiento social dividido, pero con la firme convicción que, ¡UNIDAS VENCEREMOS!