Educación peruana: Donde habita el olvido

Es urgente incrementar la inversión en educación al 6% del PBI.

El Covid-19 ha puesto a prueba sectores olvidados en el Perú como la salud y la educación. Por un lado los protocolos de salud ante la atención de casos potenciales del virus han fallado, mientras que en educación, el Minedu ha lanzado entre bombos y platillos el programa Aprendo en Casa, que se ha transformado en un paliativo que no cubre las inmensas brechas en el sector.

Brecha digital nos impide aprovechar las TICs

A nivel nacional el 55% de docentes no hemos sido capacitados en el uso de las Tecnologías de Información y Comunicación (TICs). Los maestros y auxiliares buscamos siempre la innovación educativa. Somos especialistas en adaptar un plan curricular para que sea difundido a través de los medios de comunicación.

Sin embargo, necesitamos capacitaciones y actualizaciones para desarrollar sesiones sobre TICs en el aula y usar las herramientas digitales adecuadas para la educación a distancia. El Minedu tiene que garantizar un programa de capacitación permanente para el magisterio.

Es fundamental el uso de las TICs para la educación a distancia.

Es urgente también que se atiendan la brecha digital en las escuelas: Casi el 80% de colegios no cuenta con internet. Si no atendemos esta necesidad, nuestros alumnos nunca sabrán del gran aporte de las TICs en su vida académica y profesional, y se profundizará la desigualdad educativa.

Brecha de desigualdad educativa

Este 4 de mayo se ha dispuesto el inicio presencial del año escolar 2020. Estamos en emergencia nacional, por eso debería ser indispensable que las escuelas cuenten con los servicios básicos en óptimas condiciones. Lamentablemente, en el Perú, la realidad nos golpea. La desidia e indiferencia de los gobiernos de turno son el detonante.

La educación peruana está en emergencia sanitaria. Los cifras de las carencias en los colegios son alarmantes:

El 43% no cuenta con agua potable.
El 41% no tiene un sistema de desagüe.
El 29,8% no tiene electricidad.

¿Cómo podemos hacer frente al coronavirus en estas condiciones? ¿Sin agua, desagüe, ni electricidad podemos hablar de escuela pública de calidad?

Antes del inicio de las clases presenciales es urgente que el Minedu atienda la crisis de salubridad en las instituciones educativas. No basta con kits de aseo y fumigar los locales educativos, la solución tiene que ser contundente. Es prioridad resguardar la salud de maestros, auxiliares y estudiantes.

Colegios al borde del colapso

La brecha en infraestructura educativa es de S/ 100 mil millones y este año el gobierno solo destino S/ 4 mil millones. Es decir, tienen que pasar más de 24 años para que existan colegios en buen estado en todas las regiones. Por su parte, el Minedu se contradice. El presupuesto que dispone es insuficiente, sin embargo su Plan Nacional de Infraestructura indica que al 2025 se atenderá la brecha de infraestructura educativa al 60% y que entre el 2030 a 2035 cubrirán el 100%.

No se puede arriesgar la seguridad de nuestra comunidad educativa.

Sin inversión la promesas políticas son pura demagogía. Las principales víctimas seguimos siendo maestros, auxiliares y estudiantes. Existen cerca de 28000 escuelas públicas que deben ser demolidas porque están en pésimo estado. Los trabajos más urgentes que hay que realizar, según el Programa Nacional de Infraestructura Educativa (Pronied), son:

Reparación de techos
Trabajos de carpintería
Cambios de pisos en zonas heladas
Reconstrucción de pabellones

Déficit de mobiliario educativo

El 42% de colegios no tienen sillas ni carpetas. Nuestros estudiantes usan ladrillos para poder sentarse y escribir. También improvisan carpetas con madera. En estas condiciones sería totalmente irresponsable iniciar el año escolar.

Los colegios no cuentan con inventario físico.

Si no realizamos una fuerte inversión en educación nunca seremos un país desarrollado. Tenemos que erradicar las políticas neoliberales del sector. Esta es una evidente muestra de su fracaso histórico.

Es urgente el 6% del PBI para educación. De esta manera, se podrán atender las brechas educativas. Las cifras no pueden ser tan escandalosas. El Minedu debería realizar un cronograma de trabajo para el saneamiento de los baños y la implementación de internet en los colegios. La declaratoria de emergencia sanitaria tiene que aprovecharse para declarar en emergencia la infraestructura del sector. Maestros, auxiliares y estudiantes merecemos una escuela pública gratuita y de calidad. Estaremos vigilantes al panorama educativo, siempre realizando propuestas.